Hola a todas:
Hoy os quiero describir como fue mi experiencia, en lo que a gastronomía se refiere, durante mi estancia en la isla de Sao Miguel.
Lo primero de todo: no me gusta comer pescado, ya sé que es necesario y todo eso... pero si no tengo algo de presión, yo, por mí mismo, es muy raro que coma productos del mar. Por tanto, viajando solo, os podéis imaginar cuánto pescado he comido: nada. Bueno, es cierto que un día cené pulpo, pero eso, para mí, no es pescado. :-)
Así que, si quitamos de la ecuación el pescado, estando en una isla de pescadores, os hacéis una idea de que me he perdido una parte bastante importante de la gastronomía local. Sobre todo el omnipresente bacalao, que estaba anunciado por todos sitios.
Por lo demás, la isla está llena de vacas, cerdos y gallinas, así que los platos estrella, obviando lo que viene del mar, es la carne de estos animales.
Del cerdo, sobre todo hay embutido, morcilla y chorizo, para ser más exactos. De la vaca y el pollo, todo tipo de filetes, de todas las partes. Más o menos como en España, vaya.
Lo más sorprendente fue el uso de la piña en los platos de carne: piña con ternera, piña con morcilla... Me encantó esa mezcla de sabores. En concreto, la piña con la morcilla me pareció un auténtico manjar.
Otra cosa muy típica de la isla es el queso: sobre todo en dos variedades, queso fresco y queso de Sao Jorge. Ambos de vaca. Soy un incondicional del queso, y me gusta siempre. No sabría decir cuál me gustó más.
También me gustaría reseñar que comer es sensiblemente más barato que en España, o que, al menos, en Madrid. No vi sitios excesivamente caros, y los restaurantes y bares normales tenían precios muy asequibles, estando los platos de carta en valores de unos 10-12€ los platos más caros.
En el tema de la comida no fui nada ahorrador, simplemente me dejaba guiar bien por Trip Advisor, bien por alguna recomendación, o bien por el horario, ya que algunos días terminaba mi recorrido a unas horas en las que comer aquí era casi imposible, por estar la cocina cerrada... (empiezan a comer a eso de las 12 del mediodía, y a cenar sobre las 8 de la tarde o antes).
Y una vez dicho todo esto, os voy a recomendar algunos de los sitios que más me gustaron durante el viaje...
Ponta Delgada:
- Restaurante ENTRE-NOS Bistrô (Travessa do Henriques, nº 6, 1º): Restaurante de bastante calidad, y precios algo altos, para lo que es la isla. Me gustó mucho.
- Restaurante-Cervejaria Donatello (Rua Caetano Andrade Albuquerque, Antiga Rua de S. Francisco, 16): La última cena del viaje la hice en este sitio, y la verdad es que me encantó.
Vila Franca do Campo:
- Restaurante Universo (Rua Dr. Augusto Botelho Simas, 7): Lo tenía justo debajo de mi alojamiento. Dueños simpáticos y comida buena.
- Taberna irlandesa Ned Kelly's Irish Pub and Grill (Rua do Corpo Santo, 11): En este sitio no llegué a comer nada, pero sí me tomé unas cervezas y estuve un rato charlando con el dueño del lugar, un irlandés muy simpático. Según otro cliente, allí se hacían las mejores hamburguesas de la isla... seguramente sea verdad. Merece la pena ir, ya que es la única taberna irlandesa de la isla, y se respira buen rollo.
Nordeste:
- O Forno (Rua D. Maria do Rosario, 2): Comí dos días aquí, el primero porque llegué tardísimo y era el único que me ofrecía de comer... y el segundo porque intenté buscar otro sitio, pero no encontré nada abierto mejor. Todo estaba bien, sin ser nada del otro mundo.
- En Pedreira, Nordeste, cené un día en "Café Central", que es un bar-tasca-tugurio... sólo hay hamburguesas y perritos calientes. No merece la pena. Cené allí porque no había ningún sitio abierto cerca. Las otras dos noches que pasé en la localidad cené en casa, tras comprar cosas en el supermercado del pueblo.
Furnas:
- Restaurante Miroma (Rua Dr. Frederico Moniz Pereira, 15): Es un restaurante que me gustó mucho. La estancia es una nave grande y alta, en la que el ruido campa a sus anchas. Me recomendaron este sitio en la taberna irlandesa de Vila Franca do Campo, y estuvieron muy acertados. Comí el cocido local, que me encantó.
Ribeira Grande:
- Boteco do Miguel (Rua do Estrela): Comí en una pizzería, porque era lo único que estaba abierto. Fue una recomendación de Trip Advisor. El tipo que la regenta era muy simpático y amable. La pizza la eliges tú a tu gusto, y, en mi caso, me encantó. Por 8€ una pizza demasiado grande para una sola persona.
- Snack Bar Carlos Freire (Rua de Sao Francisco, 69): Aquí piqué algo para cenar, y, anteriormente, por la tarde, estuve haciendo tiempo hasta que pude hacer check-in. Muy amables dejando que estuviera allí casi dos horas con todo el equipaje... Tienen sobre todo bollería (casera); es muy barato.
Mosteiros:
- Snack-Bar Restaurante O Chico (Rua da Ponte, 7): Este pequeño y acogedor restaurante me encantó. No solo por la comida (una morcilla espectacular), sino porque las paredes estaban decoradas con discos míticos de los 60's, 70's y 80's. Lo recomiendo, sin duda.
Ginetes:
- Cafe Restaurante Tres Arcos (Estrada regional 73-75): En este sitio cené, recomendado por el alojamiento de Villa Várzea. El dueño es un señor muy amable, y la comida estaba buena y barata.
Y hasta aquí el repaso... De los sitios donde desayuné no tomé nota, pero tampoco es que merecieran mucho la pena. Hubo días en los que comí o cené cosas que compré en algún supermercado, así que tampoco voy a hablar de eso.
Espero que la información os pueda ser útil si alguna vez vais a Sao Miguel.
¡Saludos!